¡Ayuda a tus alumnos a alcanzar su máximo potencial!
Del 6 al 19 de julio y 20 de julio al 2 de agosto, podrán explorar nuevas culturas y hacer amigos internacionales.
Más allá de ser considerados como una actividad de pasatiempo, ocio y diversión, los videojuegos son una importante herramienta educativa al potenciar la curiosidad de los estudiantes por aprender y desarrollar determinadas habilidades, tanto cognitivas como sociales y emocionales, además de contribuir a incrementar el número de matriculados en los colegios
La educación ha sufrido un proceso de evolución en el que su adaptación a los nuevos tiempos ha sido necesaria para que alumnos y profesores encuentren puntos de interés para desarrollar sus conocimientos.
Pero, ¿podemos aprovechar el potencial que ofrecen las nuevas tecnologías, y más concretamente los videojuegos, para proponer soluciones educativas que motiven a los alumnos durante su periodo lectivo? La respuesta es claramente afirmativa.
Son varios los estudios que apuntan las ventajas de la gamificación o la práctica educativa consistente en aplicar las mecánicas de los videojuegos (acumular puntos, escalar niveles y obtener premios) en la docencia con el objetivo de que los estudiantes mejoren sus calificaciones, además de permitir el desarrollo de distintas habilidades.
En comparación con el método educativo tradicional, la gamificación permite a los alumnos y alumnas un mayor desarrollo del pensamiento analítico, que ayuda en el estudio y la resolución de problemas que requieran la aplicación del método científico.
De acuerdo con investigaciones publicadas en la revista Scientific Reports, el uso de estas tecnologías como herramientas educativas fomentan una mejor coordinación mano-ojo, una mayor capacidad de concentración y, en los juegos multijugador, el desarrollo de las habilidades sociales.
Entre las virtudes que se exploran están la integración, el respeto, la disciplina, el trabajo en equipo, la superación y la competitividad, claves dentro del universo de los videojuegos y los eSports, que engloba todos aquellos torneos o ligas en las que se compite en un determinado videojuego.
Para entender mejor esta propuesta, los expertos explican que hay que reconocer que, como los libros o las películas, los videojuegos también tienen narrativas ricas en calidad, diversidad y experiencias. De ahí que cada vez más colegios contemplen dentro de las actividades extraescolares los videojuegos y los torneos de eSports como forma de trabajar en clase valores, ayudar a los alumnos a desarrollar habilidades fundamentales e introducirlos a nuevas oportunidades profesionales.
Además de diversificar las actividades extraescolares y preparar mejor a los estudiantes para el mercado laboral el día de mañana a través del desarrollo de habilidades del futuro, otra motivación que lleva a los colegios a apostar por los videojuegos es el incremento del número de matriculados.
Por otra parte, padres de familia recelosos en un principio del impacto de los videojuegos en la vida familiar al considerarlos como una posible distracción para sus hijos o una forma de evadirse, hoy reconocen las oportunidades de crecimiento y profesional que ofrecen, los perciben como una herramienta educativa más, una manera eficaz de gestionar las emociones o de trabajar en equipo.
Videojuegos: los beneficios en la educación
Facilitan el aprendizaje de conceptos.
Derivan en experiencias positivas, al ser lúdicas.
Fomentan el desarrollo mental.
Facilitan la integración a los equipos.
Estimulan a los estudiantes, al igual que el espíritu de superación.
Inspiran a alcanzar objetivos en el mediano y largo plazo.
Fomentan la creatividad, la memoria visual y la atención.
Amplían la diversidad de los idiomas, facilitando su comprensión.