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IA: el aprendizaje inteligente, más allá de ChatGPT
Cada vez más colegios están adoptando la IA como tecnología para respaldar el aprendizaje inteligente, yendo mucho más allá de ChatGPT, con el propósito de proporcionar una educación más eficiente y enfocada en las necesidades individuales de los alumnos
Las aulas de los colegios viven el momento histórico de afrontar la transformación digital en la educación, con el objetivo de lograr eficacia, eficiencia y adaptabilidad a cualquier contexto. En este escenario, la inteligencia artificial (IA), una tecnología revolucionaria comparable a la evolución de la web 2.0 o motores de búsqueda como Google y Wikipedia, que globalizaron el acceso a vastas cantidades de información, se presenta como un aliado fundamental para la enseñanza de esta nueva era. Es lo que se denomina aprendizaje inteligente.
En pocas palabras, el aprendizaje inteligente se define como la aplicación de la inteligencia artificial y otras tecnologías avanzadas en la educación. A través de algoritmos inteligentes y el análisis de datos, este enfoque busca personalizar los procesos de enseñanza y aprendizaje, adaptándolos a las necesidades y ritmos individuales de cada estudiante. Esto va más allá de una educación estándar y busca potenciar no solo las habilidades cognitivas, sino también las emocionales y sociales, así como fomentar la creatividad y el pensamiento crítico. Sin embargo, es fundamental estar preparados para la correcta aplicación de esta poderosa herramienta educativa.
Si bien la interacción con sistemas de chat basados en IA, como ChatGPT, ha sido un avance significativo en el campo del aprendizaje inteligente, esta tecnología tiene un potencial mucho más amplio.
La introducción de la formación personalizada basada en la IA, con sistemas de recomendación similares a los utilizados en el comercio electrónico, resuelve una de las mayores frustraciones de los docentes y aborda el desafío de permitir que cada estudiante aprenda a su propio ritmo, para evitar que los alumnos más despistados se queden rezagados o que los más avanzados se desmotiven debido a clases poco productivas.
Expertos en inteligencia artificial y big data subrayan la importancia de distinguir entre aprender IA y utilizar IA. Aseguran que es fundamental desarrollar entornos personalizados que permitan a los estudiantes avanzar o reforzar conceptos de acuerdo a su capacidad de absorción de conocimientos.
En este contexto, es esencial destacar que la IA no reemplaza a los docentes, sino que actúa como un asistente que facilita el aprendizaje. Los modelos de IA son herramientas valiosas que complementan la labor de los profesores, brindando apoyo y permitiendo a los alumnos interactuar con ellos de manera personalizada.
En definitiva, el aprendizaje inteligente impulsado por la IA tiene el potencial de revolucionar la educación al proporcionar un enfoque más personalizado, adaptativo e interactivo. La integración efectiva de la inteligencia artificial en la educación puede abrir un mundo de posibilidades, permitiendo a los alumnos desarrollar habilidades clave para el futuro y alcanzar su máximo potencial.
(Fuente: El País)
