La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) señala en un informe que la pandemia ha intensificado las brechas entre los países y alerta de las crisis silenciosas que enfrenta la región en educación, igualdad de género y medio ambiente
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) alertó de la presencia de tres crisis silenciosas en la región relacionadas a la educación, la igualdad de género y medio ambiente, lo que forma parte del poco avance en el cumplimiento de la Agenda 2030.
Así lo detalla el informe Una década de acción para un cambio, presentado por la CEPAL durante la Quinta Reunión del Foro de los Países de América Latina y el Caribe sobre Desarrollo Sostenible, celebrado en Costa Rica.
El estudio señala que, en el sector educación, la pandemia de Covid-19 ha causado un fuerte golpe y ha abierto la posibilidad de que la región sufra "una generación perdida", explicó la directora ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena.
La segunda de estas "crisis silenciosas" es la de la violencia contra las mujeres y la recarga del trabajo en hogar durante la pandemia.
El informe menciona que un tercio de las mujeres es víctima de violencia en la región y que en promedio dedican el triple del tiempo que los hombres al trabajo doméstico y al cuidado de la familia.
La otra crisis es la ambiental, que consiste en una pérdida de la riqueza natural, problemas hídricos, incendios forestales, sequías, entre otros.
El informe indica también que la región cuenta con el 23 % de los bosques del mundo, pero que en los últimos 30 años ha perdido 138 millones de hectáreas, y se ha intensificado la contaminación y los usos de suelo.
El Caribe es una de las regiones más vulnerables a los desastres naturales, por lo cual uno de los planteamientos de la CEPAL es impulsar el canje de deuda por acción climática, mediante la cual también se establezca un fondo de resiliencia.
El presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, dijo que la atención debida hacia asuntos como la recuperación económica, la lucha contra el cambio climático y la atención a las necesidades de salud, en el marco del respeto a los derechos humanos, "tienen que seguir siendo las líneas de acción prioritarias de nuestros gobiernos”.